16 febrero 2008

Sí, pero...


Pues sí, este tipo de carteles o pegatas tiene su gracia. Pero preferiría que no pasaran del círculo de amiguetes. Difundirlos a mansalva es no saber cómo funciona la propaganda. El brazo político del GAL sí que lo sabe y se sentiría encantado con su difusión. Ellos saben, digo, que la propaganda se dirige más al subconsciente que a la inteligencia (la mayoría de sus votantes tiene muy poca), más a lo subliminal que a lo racional. La imagen es mil veces más eficaz que el mensaje verbal, y hay mucha gente que no mira las letras. Y ahí, como siempre, el brazo político del GAL da sopas con honda a la derecha. ¿Alguien ha pensado que los socialistas pueden ganar por los méritos de su política? Pero mirad los carteles de la precampaña, por favor. Ahí tenéis a Rajoy con el modelito de siempre, rectángulo blanco con el careto en el tercio izquierdo y el eslogan en el resto del espacio. Mirad la cara de pardillo ante el photomaton que tiene don Mariano, y decid si eso puede competir con el diseño sociata, mucho más en sintonía con la creatividad comercial que lo rodea, fondo negro con el ZP en plan dinámico y optimista tras no se sabe cuántos intentos de captar el mejor ángulo de su cara de sapo. La simple comparación resulta ofensiva. Así que, muchachos, a cambiar de estrategia. Poned el mismo eslogan pero en el rectángulo blanco y con uno de los muchos lados tontos de la jeta del presidente por accidente, ja, y ganaréis en eficacia lo que se pierda en vis paródica. De nada.