30 junio 2021

Si está todo muy claro, hombre.

Michael Signorile, periodista homosexual:

Pedimos el derecho a casarnos no como una forma de adherirnos a los códigos morales de la sociedad, sino de deshacer un mito y alterar radicalmente una institución arcaica. La acción más subversiva que pueden emprender los gays y lesbianas es transformar por completo la noción de familia.

Citado por Alicia Rubio, Cuando nos prohibieron ser mujeres…, capítulo 19, final





27 junio 2021

Los renglones

Están preparando una versión cinematográfica de Los renglones torcidos de Dios. Un tal Oriol Paulo como director. (Digo un tal porque entiendo poco de cine español, qué le vamos a hacer). Solo espero que sea mejor que la mejicana que ya existía, realmente patética, a juzgar por los trozos que vi en Youtube, o en algún otro sitio.

Y también espero que no le tumben el proyecto cuando se enteren de que el tipo que escribió la novela original apoyó el golpe de Pinochet en un artículo de ABC y renunció a su silla de procurador en Cortes cuando se legalizó el PCE. La memoria, ya saben…

¿Qué no dé ideas? Bah, a lo mejor le hago un favor a la novela…



16 junio 2021

La vida nueva

La Vida nueva de Dante y las Rimas de Cavalcanti en un solo volumen de Siruela, bonito volumen de tapa dura, con ilustración de la Divina Comedia en la portada. Edición bilingüe hasta de los comentarios en prosa de Dante a sus sonetos. Traducción de Julio Martínez Mesanza en lo de Dante y de Juan Ramón Masoliver en lo de Cavalcanti. Una joyita, vamos. Martínez Mesanza traduce bastante ajustado al texto original, lo que permite ir cotejando, pero he de reconocer que me hubiera gustado una traducción más literaria. Por ejemplo, que respetara la forma del soneto, aunque no queda mal el verso libre que ha elegido. Por supuesto, no me he tragado los comentarios en italiano, porque no domino la lengua para tanto.

Otro día me meteré con Cavalcanti.


13 junio 2021

Juan de la Cierva

Si hubiera que quitar el nombre a todos los lugares, instituciones, eventos, etc., cuyo titular tuviese alguna mancha en su vida, nos quedaríamos, no sé, con la ciudad de San Francisco y con la miel de la Granja ídem, y poco más. Una vez más, la familia de Juan de la Cierva toma la línea de defensa equivocada: no hay documentos que prueben que apoyó al bando franquista. Y si lo hizo, ¿qué? ¿Es que apoyar al bando de Negrín lo hubiera hecho más decente? Según ese modo de razonar, si realmente se probara que su abuelo estaba por Franco, sí que habría que negarle honores. Un genio, el nieto.

El ingeniero español es víctima del gobierno más estúpidamente sectario (y envidioso) de la historia de Europa, y no hay más. ¿O habrá que cambiar el nombre a los productos Chanel, dejar de editar los discos de von Karajan o volver a condenar al silencio a Ezra Pound? Y eso en la hipótesis de que se pudiera equiparar a Franco y a Hitler. Mejor dejo de dar ideas.



 

11 junio 2021

Tertulianos

Pensé que esta palabra era un barbarismo surgido con ocasión de las tertulias radiofónicas. Pero no. Hete aquí que me lo encuentro en la Vida de Torres Villarroel, siglo XVIII.



08 junio 2021

Tanto más ardientes...

Armando reflexiona sobre cómo es más difícil conquistar el amor de una prostituta que el de una jovencita.

Ser amado por una joven casta, ser el primero en revelarle ese extraño misterio del amor ciertamente es una gran felicidad, pero es la cosa más sencilla del mundo. Apoderarse de un corazón que no está acostumbrado a los ataques es entrar en una ciudad abierta y sin guarnición. La educación, el sentido del deber y la familia son muy buenos centinelas, pero no hay centinela tan vigilante que no pueda ser burlado por una muchachita de dieciséis años, cuando la naturaleza, por medio de la voz del hombre que ella ama, le da esos primeros consejos de amor, tanto más ardientes cuanto más puros parecen.

(En La dama de las camelias, capítulo XII)




 

 

04 junio 2021

La expresión “yo quiero”

funciona entre nuestros jóvenes como sinónimo de “yo tengo derecho a”. Y no es casual. Esta conducta es coherente con lo que la publicidad nos está continuamente animando a creer: que tenemos derecho a aspirar a que la equivalencia entre “yo quiero”, “tengo derecho a” y “yo puedo” sea un valor innegociable.

“La adolescencia: la cultura anfibia”, en El deber moral de ser inteligente.