Interesante esta observación de Fabrice Hadjadj, comentando a Guardini:
Romano Guardini decía
que la modernidad es desleal, porque toma cosas que provienen del cristianismo,
pero las arranca del cristianismo. Como cuando se coge una flor, se corta, se
arranca de la planta y se coloca en un jarrón. Y se dice ¡ah, qué flor tan hermosa!
Pero, después de un tiempo, muere, porque no tiene raíces. Eso es lo que
sucede.