06 marzo 2020

Pemán


Leo las razones de los que critican la retirada de los bustos y demás iconos de José María Pemán. La mayoría me parecen tan lamentables como la propia decisión sectaria del ayuntamiento gaditano. Que no era franquista. Oh, no. Pues va a ser que se opuso al alzamiento con todas sus fuerzas y que sufrió cárcel y destierro durante el régimen, si os parece. ¿Franquista cien por cien? ¿Quién lo fue, salvo Carmen Polo, quizá?

No, por Dios, Pemán no era franquista, era católico y monárquico y discutió algunas decisiones del generalísmo. A parecer, si hubiese sido franquista hasta la reverencia habría derecho para quemarlo en efigie y prohibir hasta la mención de sus obras. Así llevamos cuarenta y dos años, preparando el terreno a las leyes mordaza de la actual gobierna. Enhorabuena.