Bueno, pues eso será problema de los mejores alumnos, que ya
se ve que no son tan buenos, al menos en eso de la ciudadanía. "Esto es lo
que me cabrea: yo digo blanco, tú dices negro y te pego un tiro", venía a
decir el prota de la película Bajo las estrellas al oír la noticia de un
atentado (lo que le costó acto seguido una paliza, por cierto). De negar el
saludo a pegar un tiro hay sólo una diferencia de grado. Así que los mejores
alumnos no hacían sino dar la razón a Wert en cuanto al fracaso de
la educación socialista, hasta en su asignatura estrella. Y permiten atisbar
cómo es la democracia de la generación indignada.
"Usted ha sido rechazado por los padres, los profesores
y los rectores", dice además la Valenciano. Desde que a los
socialistas les dio por decir el pueblo para referirse a ellos mismos,
le han cogido gusto a esto de tomar el todo por la parte. Supongo que se
refiere a ciertos padres (se le olvidó decir y madres, lo que
aumentaría el número de colectivos), a ciertos profesores (idem
con profesoras) y a ciertos rectores (idem), que si hay que
juzgar por el número de los que se arrean de verde están en proporción de uno a
cinco en el mejor de los casos. Pero es lo de siempre: ¿dónde estaban los otros
cuatro quintos cuando arruinaron realmente la enseñanza pública?