05 febrero 2007

A tomar nota

Qué barbaridad,
qué barbaridad:
te ponen una bomba
y quieres negociar.

En el hervor de la rebelión cívica (como con optimismo la denomina Alcaraz) del sábado en Madrid, me llamó la atención esta copla cantada por los de Unificación Comunista de España, partido maoísta residual enfrentado al comunismo separatista de ETA. Allí estaban, con sus grandes banderas rojas, con su hoz y martillo, fuera de lugar como antena parabólica en peli de romanos, pero dando ejemplo de oficio manifestante. El suyo fue el único sonsonete que pudo escucharse. Los demás coreaban lo de siempre, con la monotonía acostumbrada y alguna variante (el único accidente/ es el presidente; todos a una/ contra Batasuna... ). Pero estos rojetes, en su zona, dominaban el ambiente. Debieron de pensar, en términos de Asterix: "estos fachas están majaretas". Lo que hubieran hecho ellos con millón y pico de personas desparramadas por Madrid, no apelotonadas en la plaza, podría haber acabado en un vuelco que dejase chiquito al 14M.