29 noviembre 2006

Educación socialista

El chico escribe en diagonal, con letra basta, caligrafía ilegible. La estela temblorosa de la tiza va dejando palabras inventadas, unidas las unas a las otras como hermanos siameses, aberraciones gramaticales de todo tipo: alternancia de terminaciones verbales en ava y aba, pecados ortográficos y un desierto acentual absoluto. La pizarra se va llenando de monstruos blancos: malformaciones, deformidades, mutilaciones, arácnidos y sirenas léxicas, centauros, quimeras... ¿Qué hace este chaval en cuarto de ESO? ¿Cómo es posible que haya llegado a cuarto? Con la reforma, un curso es sólo una unidad de tiempo...

Toni Sala, Diario de un profesor en Secundaria