09 mayo 2017

Don Francisco y los duelos

A propósito de una alusión, en un soneto de Quevedo, a los libros del duelo, anota José Manuel Blecua: “Las reglas observadas en los duelos, de los que nunca fue muy partidario Quevedo”. Y aduce en su apoyo esta cita de su obra Providencia de Dios: “Este disparate sangriento, esta rabia facinorosa, esta furia delincuente en lo divino y humano, que se intitula Libro del duelo, tiene la infamia de su decendencia tan antigua como el mundo.”

Vaya, vaya. Ya veo lo que puede uno fiarse de Arturo Pérez-Reverte en cuando a fidelidad histórica. En sus Alatristes, Quevedo es un pendenciero que saca la espada a la mínima, sobre todo cuando ha soplado del tinto. No deja de tener simpatía el personaje, pero me complace sacar por mentirosillo al bocachanclas de Cartagena.